Después
de todo, es lo más parecido al querer a lo que se puede aspirar
desde que todo se fue a la mierda.
Al
principio pensé que iba a ser su presa, como lo fue mi familia de
aquella caótica banda.
Yo
huí, los dejé atrás.
Entonces
él me encontró, me escondió y me salvó de ellos.
Aún
recuerdo como me sujetaba y me aprisionaba la boca para que aquella
niña asustada que era, no gritara mientras ellos pasaban de largo.
Con
el tiempo pensé que me tenía de mascota; cuidaba de mí, yo le daba
compañía. Y me conformaba.
No
sé muy bien cómo pasó. Nunca me había dado muestras de afecto,
pero cultivó algún tipo de relación.
Crecí
y cuando la primera sangre llegó, las miradas de deseo también.
Al
principio, me resistí.
No
valió de nada.
Luego,
dadas las circunstancias… Irremediable.
Necesario
quizás.
Ahora
llevo a su hijo en mi vientre.
Eso
debe significar algo.
Me
da las mejores raciones.
Siempre
dice que debo alimentar a dos.
Y
su mirada es distinta.
Como
cuando caza y asa un pollo.
Debe
ser amor.
* * *
Por motivos personales, cambié el objetivo por el del relato, pues no puedo enfrentarme este año a escribir sobre un embarazo. Veía difícil hacer cualquier cosa con este objetivo. Lo único que se me ocurría era esto, cambiar ese objetivo para un micro. Al menos debería escribir menos y por tanto pensar. Aunque dudaba que finalmente pudiera escribir nada. Pero, llegó Brayan con su relato El rescate, y me dio una oportunidad única. Espero no degradar demasiado la esencia de dicho relato, que tenéis que leer, porque es muy bueno.
185 Palabras
984 Caracteres (con espacios)
818 Caracteres (sin espacios)
Párrafos 19
Oraciones 21
Aún lo has hecho más duro que el mío, que ya es decir. Espeluznante, pero muy buen trabajo a la hora de dirigir las emociones.
ResponderEliminarMuchas gracias por el enlace!
¡Oh, gracias!
EliminarEspeluznante. Me gusta que de esa impresión y más viniendo del creador de la inspiración. De hecho, dudaba en si habría que poner algún aviso de esos que los modernos llamaís triggeting warning o como demonios se diga.